Weekly Wisdom, EBG International

¿Qué debes saber?

Como inversionistas, todos conocemos el viejo lema «Compra barato, vende caro». Desgraciadamente, las emociones humanas no funcionan de esa manera.

La siguiente gráfica muestra los flujos de capitales entrantes y salientes de los fondos de renta variable y los fondos ETF estadounidenses (en azul), frente al rendimiento del S&P 500 (línea gris) desde 1995:

US taxation of non-resident aliens

La tendencia es clara, las grandes salidas ocurren justo cuando los mercados tocan el fondo de un descenso temporal.

Dicho de otro modo, muchos inversionistas hacen exactamente lo opuesto de lo que deberían hacer: venden, en lugar de comprar, cuando los mercados están bajos.

¿Por qué debe importarte?

Es una reacción emocional muy comprensible. Vender inversiones y pasarse a depósitos en efectivo cuando los mercados caen y cunde el pánico puede sentirse como lo correcto. Como humanos, estamos programados para huir de lo que nos parece peligroso.

Sin embargo, el hecho es que al vender, «aseguras» las pérdidas y conviertes los descensos temporales en retrocesos permanentes.

Cuando vuelve el sentimiento positivo y los mercados empiezan a recuperarse, te pierdes el repunte.

Los excelentes retornos a largo plazo de la inversión en renta variable son indiscutibles. Sin embargo, debes recordar que sólo te beneficiarás de estos rendimientos si mantienes la calma y te resistes a tomar decisiones impulsivas a lo largo del camino.