¿Qué debes saber?
Remóntate al año 2000. Britney Spears era la número uno, Enron sólo era otra empresa energética, todo el mundo tenía un teléfono Nokia en el bolsillo y Apple era un mediocre fabricante de computadoras.
Si nos adelantamos hasta hoy, el mundo es un lugar muy distinto. Tres de las empresas anteriores han implosionado o desaparecido en la intrascendencia, y una se ha convertido en la mayor empresa de todos los tiempos.
¿Cuántos hubiesen previsto ese resultado en el año 2000?
La siguiente gráfica muestra cómo ha cambiado la clasificación de las 20 empresas públicas estadounidenses más valiosas desde el 2000 hasta hoy:
Hoy en la lista sólo quedan 3 empresas que estaban presentes en el año 2000.
¿Por qué debe importarte?
El mundo cambia continuamente. Centrar tus decisiones de inversión en «lo que funciona hoy» es una receta para el fracaso.
Por muy seguro que parezca el futuro de una empresa en la actualidad, hay cientos de factores imprevistos que podrían cambiar esa trayectoria, para bien o para mal.
La innovación, la competencia, los cambios normativos, los pleitos, las actitudes sociales cambiantes, las decisiones de gestión y el sentimiento del mercado son algunos de los muchos factores que pueden alterar la trayectoria de una empresa o industria de forma muy notable.
La historia nos cuenta que invertir en una cartera que es ampliamente diversificada y refleje el mercado de valores global es la forma más confiable de proteger y hacer que crezca tu dinero.
A medida que las tendencias y las empresas van y vienen, tu cartera se ajustará y evolucionará de forma natural para incluir las mejores empresas de cada momento.
